Los sumerios fueron una antigua civilización que habitó en la región de Mesopotamia, actualmente conocida como Irak. Esta civilización se desarrolló alrededor del año 4000 a.C. y se caracterizó por ser una sociedad avanzada en términos de religión, arquitectura, escritura y gobierno.
El gobierno sumerio
El gobierno sumerio se basaba en una monarquía teocrática, es decir, el rey era considerado un dios y tenía el control absoluto sobre el territorio y la población. El rey era asistido por un consejo de ancianos y sacerdotes, quienes lo aconsejaban en la toma de decisiones importantes.
El rey sumerio tenía la tarea de mantener el orden en la sociedad y garantizar la protección de su pueblo. También era responsable de la construcción y mantenimiento de los templos y monumentos religiosos, ya que la religión era una parte fundamental de la cultura sumeria.
Los sacerdotes sumerios
Los sacerdotes sumerios eran una clase privilegiada en la sociedad. Eran los encargados de realizar los rituales religiosos y mantener la comunicación con los dioses. Además, eran responsables de la educación y la escritura, ya que la mayoría de los textos sumerios eran de carácter religioso.
Los sacerdotes también tenían un papel importante en la política, ya que asesoraban al rey en la toma de decisiones y tenían el poder de influir en la opinión pública.
La importancia de la escritura
La escritura cuneiforme fue una de las mayores contribuciones de los sumerios a la humanidad. Esta forma de escritura consistía en hacer marcas en tabletas de arcilla con un estilete de caña, lo que permitió a los sumerios registrar su historia, leyes y religión.
La escritura también permitió a los sumerios llevar registros de sus transacciones comerciales y administrativas, lo que facilitó el comercio y el gobierno.
Conclusión
los sumerios fueron una civilización avanzada en términos de gobierno, religión y escritura. Su gobierno estaba basado en una monarquía teocrática, donde el rey era considerado un dios y los sacerdotes tenían un papel importante en la política.
La escritura cuneiforme permitió a los sumerios registrar su historia y llevar registros de sus transacciones comerciales y administrativas, lo que facilitó el comercio y el gobierno.